Llantos y paseos
de esquina a esquina dentro del cuarto, llantos y canciones de cuna, llantos y
mi marido roncando. En este post te contaré una historia típica de padres, quizás te paso a ti o te pasará, acompáñame en esta historia.
Los cuentos de Disney
Me contaron muchas cosas; desde seguir mis sueños, pasando
por no aceptar manzanas a desconocidos, hasta pelear contra cualquier príncipe,
si es necesario. Pero, ningún cuento me dijo lo que significaba ser mamá. Y
menos me advirtieron sobre la hermosa amargura de los primeros meses. Y es que
claro, no existe sensación alguna como sus primeras sonrisas, el verlo dormir
en mis brazos o los “agús” que tanto me encantan. Sin embargo, a quien quiero
engañar, tener un hijo cansa.
Es imposible no sentirme agotada
Cuando lucho
todos los días contra esos gases que parecen que fueron enviados por el mismísimo mal para no dejarnos dormir, cuando veo al fresco de mi marido
roncando tranquilamente como si estuviera seguro de que no necesito su ayuda, o
cuando tengo que limpiar el desastre después de un cambio de pañal fallido por
la madrugada.
Aunque, créanme todo eso cansa
Menos que enseñarle a mi esposo
una y otra vez como cargar al bebé adecuadamente. En ocasiones, me parecen
increíbles sus ocurrencias, la última vez que le dije que el bebé lloraba por sueño solo atino a mirarme a los ojos por un instante, inclinar su cabeza hacia
un costado como cuando no entiendes algo y me dijo, “pero amor es tan fácil
cerrar los ojos y dormir”. Ahí comprendí que mi esposo ama con todo su corazón
a nuestro hijo, pero definitivamente nadie lo conoce más que yo, como diría mi
madre, por algo lo he parido.
Tengo que ser honesta
No
estaba preparada para esto, y jamás lo estaría. Porque nada te enseñará a
cambiar pañales como cambiar pañales, y nadie te enseñará a dormir a tu hijo
como dormir a tu hijo y nunca sabrás que es el amor hasta que nace el amor de
tu vida. Son las
5:00 am. Suena la alarma, el perro ladra, los pájaros chillan, la licuadora de
mi vecina comienza a sonar. Y mi marido para variar, roncando. Inspirado
en mi novia. Escrito por Luis Miguel Ingunza, el que ronca.
A continuación, les presentamos las ventajas de dormir con nuestros bebes.
Pdt. Si te gusto este artículo, comenta y compártelo. Esta comunidad de padres primerizos crece gracias a nosotros 😀🙌. Asimismo, te recomendamos seguir nuestras páginas Facebook, Youtube donde estaremos posteando contenido relevante para todos los padres primerizos. No te olvides de darle like y suscribirte.
1 Comentarios
Tan cierto, el conocimiento de una madre es único, y nada te prepara para ello, ni los libros ni la información en internet hasta que lo tienes contigo. Los miedos aparecen, son reales. Tienes sueño, y quieres ser el que ronca en ese momento y a la vez estar presente, sin darte cuenta que tú también debes descansar para estarlo. Después de meses, deje de sentir culpa por también querer dormir, tan plácidamente como mí hijo.
ResponderEliminar