En la vida solemos prepararnos para muchas cosas que sabemos que sucederán en cualquier momento, pero ¿cuántas veces podemos reaccionar tal como lo hemos planificado? Esta es una anécdota de padres primezos, que puede servir incluso como pequeño consejo para futuros padres.

"Felicidades, ¡va ser papá!"
Muchas veces el paisaje que pensamos pintar desde siempre, no será el paisaje que terminemos pintando en nuestras vidas.


¿Qué pasa cuando te enteras que serás papá por primera vez?



Imposible borrar aquella frase típica que tienen los doctores de decir “Felicitaciones, va ser papá”. Al vernos con tantos nervios encima, se me ha dado por pensar que en el fondo ellos nos quieren ver quebrar, tartamudear, divagar en la sombra de su consultorio. Quizá, caminar como zombies errantes, reaccionar con morisquetas incomprensibles; o por el contrarió celebrar como descontrolados la noticia, cual gol de media cancha a dos minutos del final; guardar ese momento para contárselo luego a sus familiares, amigos, reírse un rato -de nosotros, claro- y luego volvernos a mencionar una y otra vez.

No sé, se me ocurren tantas cosas, luego de escuchar lo me cuenta un amigo médico al que visité hace poco, de las cosas y bromas que se hacen entre colegas. Seré sincero, me pongo a pensar en esto, luego de recordar aquel día en que recibí la noticia que sería papá. No lo creía. A ver, porque valgan verdades, una cosa es imaginarte en el rol de padre y otra muy diferente sentirte un padre. La sensación es completamente diferente.




Yo, en el consultorio de la verdad


En mi caso, siempre quise tener un hijo, me imaginaba con tenerlo, a veces me ponía en el rol de papá, incluso dando algunos consejos a un posible futuro hijo, enseñándole cosas, leyéndole algún cuento, evaluando si tener una mascota en casa pueda ser una buena opción para él, formando sus costumbres, sus hábitos de sueño, decorando la habitación, tratándola de pintar de alguna forma, tantas cosas. Incluso me imaginaba lidiando con posibles pataletas. Pero todo ello solo era una imaginación, un deseo. Pensé encontrarme preparado para el día en que me confirmaran tal noticia. Pero nada, toda la mentalidad preparada de antemano desapareció por arte de magia cuando llegó el momento. 

De mi reacción, recuerdo la piel erizada, un cosquilleo extraño al interior de mi cuerpo, algo de frío extraño. El resto de expresiones quedarán para las anécdotas de aquel doctor. Lo cierto es que hay cosas en la vida que jamás podremos controlar, para lo que uno no puede prepararse.

"Felicidades, ¡va ser papá!"
Aún recuerdo las veces en que compartía los memes del "Yo cuando sea papá". Ilustración: Podcast con Ari

Consejo para el padre primezo


Algunos dicen que no existe un manual para ser padre, y yo les doy toda la razón, pero agrego algo más, algo que nace de mi experiencia, y que para algunos padres primerizos -o que desean serlo en algún momento- puede que hasta les resulte un consejo: uno no es padre desde que tiene un hijo, uno es padre de su hijo desde mucho antes de que venga al mundo.



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